Château de la Gardine

Gaston Brunel, un famoso comerciante de profesión, compró Château de la Gardine en 1945. La finca está actualmente a cargo de sus dos hijos: Patrick y Maxime, quienes cuentan con la ayuda de sus esposas Eve y Maryse y de sus hijos Marie- Odile y Philippe.

La finca cubre 52 hectáreas de viñedos (48 hectáreas de uva tinta y 4 de variedades blancas) y 20 hectáreas de bosque agrupadas alrededor de la propiedad. La finca es famosa por la calidad de los vinos, pero también por la botella Gardine.

Esta original y elegante botella nació cuando la familia quiso ampliar su bodega por primera vez cavando en el suelo. Gaston Brunel encontró entonces una botella muy antigua que había sido soplada a mano. La forma le gustó tanto que decidió embotellar todo su vino en una botella de similar forma. Al principio no pudo encontrar un fabricante en Francia capaz de reproducir esta botella, por lo que recurrió a un fabricante italiano. La primera cosecha que se comercializó con esta botella fue la de 1964, aunque actualmente la botella se fabrica en Francia con un molde creado específicamente para la familia Brunel.

En los últimos años, y debido al calentamiento global, la familia Brunel ha tenido que cambiar el modo de cultivo y vinificación para adecuarse a la nueva realidad y seguir cultivando uvas naturales y concentradas, lo que constituye una prioridad para esta bodega que actualmente exporta el 70% de su producción a unos 30 países.